LA ESTATIZACIÓN DEL FÚTBOL Y MIS FINES DE SEMANA

Con los domingos de radio AM y las cervecitas en el bar teníamos demasiado, pero desde que Grondona tuvo la fantástica idea de “estatizar el fútbol”, mi vida está volviéndose un verdadero desastre.
Ya no es un día a la semana sino más bien, todos los fines de semana. El bar y la cerveza quedaron en el recuerdo, y mi marido y sus amigotes, no tuvieron mejor idea que mudar el ritual dominguero a mi impecable y minúsculo departamento. Antes era sólo “el clásico”, ahora basta con que haya 22 jugadores atrás de una pelota, para reunirse a comer unas pizzas y dejarme el living patas para arriba.
Definitivamente todas mis actividades giran, ahora, en torno a esta hermosa estatización. Se acabaron las tardes de relax, porque siempre hay en casa uno de “los chicos” embobado frente a la TV. No más cine de domingo, ni asados en el campo (sin televisor).
Desde que Grondonita decidió que lo mejor era llegar a todos los hogares, mi vida de pareja se está convirtiendo en un infierno y Maradona, la AFA, y la TV, están alterando mi carácter notablemente. Hace unos días que considero la opción de elevar un pedido para que, por lo menos, costeen mi terapia y la de todas mis congéneres.

Por Julieta Gáname (Texto publicado en el suplemento "Mujeres al día" del diario Día a Día - Sábado 26 de Septiembre de 2009)